martes, abril 29, 2008

Martes 29 de abril en un intento por recuperar lo que este blog tenía de cotidiano

El sol en la ventana, bostezar. Creo que he soñado con un parque conocido y juegos pero tú parecías mucho menor. Debe ser muy tarde, agua fría. Luis Miguel acaba de iniciar sesión y hablando de quienes no somos, de quienes no queremos ser. Hace un mes y tres días que nos despedimos, parece muchísimo y tú tan cerca. Adoquines mojados. Un ave en el estacionamiento, patas dobladas hacia arriba. Tomar un café, sacar las copias: “Tímido me dijo de golpe: / ‘Señor poeta, hágame un poema de un triste pendejo’. Su amargura me hizo hacer gestos. / Escribí: ‘no hay tristes que sean pendejos’ / y nos fuimos a emborrachar

Comentarios generales del curso. Pues bien, estuvo bien, me gustó Cuesta. Un examen para llevar, no sé responder la pregunta de los ateneístas. Y Diana Mamá hablando de caligramas: “Yo cuando estaba en la secundaria le hice a mi novio una carta con forma de corazón y nadie e lo ha reconocido. Por eso creo que los genios no existen, son unos impostores.” El cielo, adoquines mojados el gorro en la cabeza y las gotas de lluvia en los lentes. Beto llama, dice que si no quiero ver Trainspotting pero el trabajo final, el trabajo. Llegar a casa, ir a la tienda. “Yo también voy a la tienda” y explicar mejor iré aquella porque siempre que compro un gansito ahí me gano uno gratis. Y yo buscando a Bárbara al salir porque mira, te lo dije, un gansito gratis. Un arco iris. Recuerdo cuando viajé a Monterrey y la carretera llena de arco iris. ¿Hace diez años? Adoquines mojados, pienso en el ave muerta, las patas arriba y la lluvia y los truenos como si el cielo estuviera por caerse. ¿Por qué son arcos? Llegar a casa, encender la lap “Honey you should know that I would never go without you...” Leer Hostalric: movimiento, movimiento, movimiento. Yo creo que nos construimos a partir del movimiento y que por eso la fantasía lo es. Pensar en el blog, lo que ha perdido de cotidiano, comenzar a escribir, Martes 29 de abril y un intento.

Sí, supongo que la realidad debe ser mucho más compleja...
pero qué más da.

5 comentarios:

Luis M. dijo...

¿pero qué más da?

Gustab dijo...

los adoquines envuelven de romanticismo cualquier escrito.
imagenes del recuerdo que chocan con nuestras mentes disparando nuestra imaginación.

Anónimo dijo...

Jamás más compleja que tus escritos, bostezo.

Ictericia dijo...

Ikaaaa no me pude despedir de ti porque estabas en clase y yo estresada y con necesidad de huir de ese pueblo. Pero adiós!!! Jaja nos vemos en Buenos Aires o en Perú. Cuídate mucho y seguimos en contacto. Te quiero roomie

las redes sociales dijo...

Adoro tu forma de escribir