lunes, enero 15, 2007

BESTIARIO.EL DOC

"Huele al hospital San Rafael” dice al entrar al cuarto. Si, precisamente a ese hospital, ahora cuarto limpio y alfombra barrida. El Doc se sienta (atentísimo a los videos de aviones despegando) y come nueces que abre estrellándolas contra el techo.

Bien podemos separarlo: Doc que se fascina por lo mecánico, lo automático, las frías superficies de metal. El Doc que pregunta por aquello que no terminaste de decir y que se ofende con la prepotencia que calla y humilla. El Doc que roba la cucharilla del expreso de su hermano para revolver su té y cuando ha terminado –¡pero qué amable!– se la presta. Es contrastante y coherente. Le gusta lo sencillo, lo agudo, lo suave y a mi me parece que un amarizaje sonaría justo así.

Vestido de colores oscuros, sobrios. Trae lentes y manos en los bolsillos de la sudadera que Beto le ha prestado. Son cuates y el Doc es más pequeño “Esa niña es como veinte Docs juntos” Se preocupa si es domingo y no asistió a misa. Yo le digo que, siendo tan cumplido, seguro ya es un Doc que camina sobre el agua. El último día que estuvo en Puebla, le ponía nervioso la palabra “peregrinación” porque debía viajar a México para tomar su vuelo y no estaba seguro de alcanzarlo. Por la noche, Beto propuso pasar por el Doc para ir al cine, pero el Doc ya se había ido y nosotros lamentamos la falta de peregrinación porque el Doc ya no estaba.

3 comentarios:

Ictericia dijo...

Ahhh es lo mejor, amo a los Espinosa!!! son lo mejoorr!!

crayola dijo...

Yo tambien!

Tienen una relación muy extraña con el techo, no?

Anónimo dijo...

Jajaja.... ese doc....

gracias crayola!